44. EL CANAL DE PANAMÁ

Ni los franceses ni los norteamericanos han sido los primeros en intentar esa grande obra. Ya en tiempo de los Reyes Católicos (1515) se buscó una línea acuática a través del istmo. El emperador Carlos V en 1534 pensaba en hacer este canal. Pero las guerras en Europa distrajeron su atención de los asuntos de América y aquel canal no pasó de ser un proyecto.

Pero el éxito alcanzado con la construcción del canal de Suez hizo pensar de nuevo en la conveniencia de construir un canal desde el océano Atlántico al Pacífico, y en el año 1870 envió el gobierno de los Estados Unidos dos comisiones de ingenieros a reconocer el terreno de los istmos de Darién en Colombia, y de Tehuantepec en Méjico, para determinar cuál de las dos vías presentaba menores dificultades y ofrecía mayores ventajas.

Después de varios estudios y no pocos gastos se abandonó la idea de construir el canal por esos dos istmos. Entonces Fernando de Lesseps y otros ingenieros franceses trazaron el proyecto de un canal por el istmo de Panamá y formaron una compañía por acciones para llevarlo a cabo. Se invirtieron en las obras muchos millones, pero el fracaso era inevitable. Entonces el gobierno de los Estados Unidos compró a los franceses y al gobierno de Panamá la concesión en 250 millones de francos.

El día 4 de Mayo de 1904 se hicieron cargo los ingenieros civiles norteamericanos de las obras del canal. Por fin, el día 10 de octubre de 1913, el Presidente de los Estados Unidos, oprimiendo un botón eléctrico, a una distancia de 3,000 kilómetros, hizo saltar el último obstáculo que quedaba en el canal con una carga de 20 toneladas de dinamita. Entonces las aguas del Atlántico se juntaron con las del Pacífico. El primer buque pasó por el canal el 14 de mayo de 1914. El canal fué inaugurado para el tráfico general el 13 de agosto de 1914.


El canal, que representa un esfuerzo colosal de ingeniería, tiene unos 72 kilómetros de uno a otro extremo. Su anchura es desde la mínima de 90 metros hasta la máxima de 300, y su menor profundidad es de 12.5 metros. Como su parte más elevada está a 25 metros sobre el nivel del mar, para llegar a ella tendrán que remontar los buques tres esclusas por una vertiente y descender otras tantas por la otra vertiente. Un buque de tonelaje regular emplea de diez a doce horas en ir de un océano a otro. El costo de esta obra colosal, incluyendo el dinero pagado a la compañía francesa y a la República de Panamá, es de 330 millones de dólares.